La vi aparecer.
Se le notaba la inocencia en las costuras de su ropa, alguien había unido esa tela como si de un escudo se tratase, habían cosido ese vestido para proclamar la inocencia y ella se lo puso pidiendo a gritos que le quitara las penas.
Mis ojos babeaban sus pasos, mi mente desnudaba su alma y es que estoy seguro de que ese vestido me hablaba. Me pedía que mordiese sus romanticismos, acariciase su ética y lamiese sus costumbres… me conto que esos labios que sin decirlo gritaban pecado, sabían cantar. Las horquillas dejaban sus sueños enredados en su pelo, su pelo…color mandarina, me hacia intuir que debajo de aquel vestido charlatán había una constelación de estrellas para contar entre sábanas y bambalinas. Le gustaba ir al galope con la esperanza de que la vida fuese más deprisa, y no le echaba azúcar al café para recordar que estaba viva…
La vi aparecer y susurro
“me quito el vestido, a cambio de mentiras”
la vida...pensamos que está ahí, pero cuando menos lo esperamos han pasado, se ha escapado entre nuestras manos
ResponderEliminarDe repente un ha pasado un día, una semana, un mes, y cuando te das cuenta de la velocidad a la que gira el mundo te das cuenta de que tu carro ha pasado y de que no tienes nada que decir, te sientes mudo, sordo, y desearías estar ciego para no dolerte de las cosas de la vida...
La vida es ahora y por lo que leo se te hace tarde, NO ESPERES NADA DE LA VIDA, NO ESPERES NADA DE NADIE, haz las cosas sin pensar en nada, solo porque quieres. Busca tus oportunidades.
Pero él solo tenía verdades que ofrecerle.
ResponderEliminarmiau
de
pastel
Increible =)
ResponderEliminarjo para que sin fin de interpretaciones da este texto.. que crack eres ras!
ResponderEliminarTu si que le quitas el vestido a las palabras cuando escribes.. que magia por dios!! un besoo
si yo fuera él diría:
ResponderEliminarme parece un buen trato.